Tras dos días de incertidumbre, la plantilla del parque de Bomberos de
Castro cobró ayer la nómina de febrero. El ingreso de los sueldos evitó
así que los profesionales de Sepisma, la sociedad que gestiona el
servicio, hiciesen realidad las movilizaciones anunciadas el pasado
miércoles, que incluían una huelga de hambre.
«Han
cumplido nuestras dos exigencias: pagar los sueldos y regularizar la
situación del servicio», reconoció ayer el delegado de UGT en Sepisma,
Nacho García. Tras mantener una reunión con los responsables
provinciales del sindicato, el portavoz de los Bomberos castreños
matizó que la decisión municipal de sacar a concurso el servicio supone
«privatizarlo».
«No creemos que sea la mejor salida, ya que en
los lugares en los que se ha hecho así, como Galicia, los compañeros
están teniendo muchos problemas y también barajan iniciar una huelga de
hambre», argumentó García, quien, pese a todo, reconoció que «si se
lleva a cabo, la opción del equipo de gobierno es una salida».
Mientras,
el ex alcalde Rufino Díaz Helguera solicitó al Ayuntamiento «cuantos
antecedentes, datos o informes obren en poder de los servicios de la
Corporación», en relación a Sepisma y al servicio de Bomberos.
Extraído de: elcorreodigital.com