"Si hubiésemos ordenado el puerto de Castro en cuatro meses que llevamos en el Gobierno, seríamos dioses", afirmó el consejero a preguntas de los medios de comunicación durante su visita al municipio.
Al mismo tiempo, afirmó que una vez que se lleve a cabo la ordenación, "es lógico que se pague por atracar, igual que se paga en cualquier puerto del mundo".