La actividad socioeducativa está teniendo lugar en los espacios del Centro de la Juventud El Camarote en horario de mañana, de lunes a viernes, hasta el comienzo del curso escolar. Ayer martes, la concejala de Educación, Patricia Camino, visitó al grupo de chicos para felicitarles por su trabajo y dedicación, tanto a los que han hecho de profesores como a los niños que dedican parte del verano a mejorar sus conocimientos.
Este proyecto solidario comenzó en el verano de 2014 con resultados “muy satisfactorios y gratificantes”, según Mayte Suárez. Desde entonces, diferentes personas se han ido sumando a la propuesta de forma voluntaria y desinteresada, “lo que la hace todavía más valiosa y enriquecedora”. En la misma se combinan procesos de aprendizaje y de servicio, al atender a las necesidades reales del entorno familiar y personal de los escolares, ofreciendo un espacio de acompañamiento y ayuda al estudio cordial y agradable.
Todo ello favorece el aprendizaje entre iguales, que “es mucho más significativo que el tradicional”, dice la maestra, y permite atender a las dificultades de cada persona a través de una relación cercana. Según Mayte Suárez, la iniciativa promueve valores como el compromiso, la participación, el altruismo y la solidaridad entre los jóvenes, que ponen al servicio de los demás sus capacidades y mejores cualidades, y también puede favorecer la inclusión de los jóvenes en procesos sociales.
La profesora tiene previsto presentar el proyecto a la convocatoria de Premios Aprendizaje-Servicio, con el apoyo del Ayuntamiento.