27 de junio de 2009, 18:11
Los cumplirán, pero eso no significa que los acepten. Es la conclusión que se alcanzó en la tarde de ayer en la asamblea que celebraron los trabajadores de la empresa de recogida de basuras en Castro Urdiales, Vertresa, para decidir si aceptaban o no los servicios mínimos fijados por el Ayuntamiento ante la huelga en el servicio que ha comenzado a las seis de la mañana de hoy sábado.“Hemos acordado dejar que salgan los servicios mínimos, que son los mismos que un turno normal, para que se le caiga la cara de vergüenza al alcalde, porque lo que está haciendo es vulnerar el derecho de huelga de los trabajadores”, advirtió ayer el presidente del sindicato Sitas, Aurelio Sañudo. Precisamente por considerar que dichos mínimos fijados transgreden los derechos laborales. Los trabajadores de Vertresa acordaron, también en la asamblea, recurrir ante la Delegación del Gobierno estos servicios, que incluyen 19 peones y 11 conductores, “cuatro personas menos que el personal que habitualmente trabaja en el municipio, dado que hay que tener en cuenta las bajas y las vacaciones del resto de los 60 operarios que integran la plantilla”, explicó ayer Sañudo.
Pero además, este sindicalista denunció el que desde la empresa se esté promoviendo una “trampa”, al haber recurrido a sus oficiales de segunda adscritos a otros servicios (como limpieza de playas), para reforzar el de recogida de basuras. Y, también, el que Vertresa haya contratado a cuatro guardas de seguridad para vigilar las instalaciones de la empresa donde se guardan los camiones, un coste superior a la petición de los trabajadores, que pasa por un incremento salarial y el abono de los domingos y festivos trabajados como tal.
La huelga en la recogida de basuras que ha comenzado hoy se prolongará durante los próximos 15 días y tiene su origen en la falta de acuerdo en la firmas del nuevo convenio colectivo de la limpieza viaria y recogida de basuras.
Extraído de: EL MUNDO
