sábado. 27.07.2024

El responsable de DYA Cantabria, Rafael Gómez Úrculo informó ayer de que ya han recibido “dos tarjetas de transporte para otros tantos vehículos-ambulancia y están en tramitación las de otros tres”.
Una consecución que “ya venimos solicitando desde el año 1998 y que, ahora, el director general de Transportes del Gobierno de Cantabria nos ha entregado en una entrevista, muy cordial, que mantuvimos el pasado martes 18 de octubre en Santander”, agregó. Una concesión que “ha tenido que pasar por la resolución de diversos trámites desde hace siete años, puesto que ya las solicitamos al Gobierno de la anterior legislatura quien nos respondió diciendo que los vehículos tenían que ser de color blanco y no amarillos como los nuestros, según un Real Decreto que, al parecer, así lo indicaba”, matizó el responsable de la DYA.

“Presentamos los correspondientes recursos y no conseguimos nada, acudimos a un gabinete de abogados, con dinero propio, y gracias a un artículo aparecido en ALERTA a toda página, conseguimos que pasaran la revisión sanitaria como paso previo a completar la documentación. Luego, volvimos a solicitarlo, pero nos dijeron que teníamos que presentar el documento de apertura del local, circunstancia ésta que, increíblemente, no nos ha sido extendido por el Ayuntamiento hasta el pasado mes de junio. Entonces solicitamos de nuevo las tarjetas y la coincidencia de que estuvo por medio el mes de agosto, vacacional generalmente a todos los efectos, ha retardado hasta ahora la concesión de dichas tarjetas”, explicó Gómez Úrculo.

“De todas formas, la Consejería de Transportes del Gobierno de Cantabria ha sido muy diligente y ha conseguido en un periodo de tiempo razonable, resolver este asunto”, comentó el responsable de la DYA.

En cuanto a si ha sido o no, perjudicada la DYA con esta cuestión, por una parte, “nos hemos encontrado durante todos estos años, en los que hemos tenido que funcionar de manera, si bien no la denominamos como ilegal, sí al menos irregular. Estábamos avanzando, por nuestra parte, en los trámites, tuvimos que iniciar ese litigio prácticamente judicial, pero nos perjudicaba el sentirnos que no estábamos dentro de la legalidad que puede ser exigida, por decirlo de alguna manera y, por otro lado, nos hemos encontrado con la imposibilidad de acceder a la Campaña de Salvamento y Socorrismo en las playas de Castro Urdiales este último verano, porque en el pliego de condiciones del Ayuntamiento se exigía la posesión de estas tarjetas sanitarias de transporte”, lamentó.

“Arma arrojadiza”

“Además, durante mucho tiempo hemos sido señalados por diversas entidades del mundo de las emergencias y por cargos políticos que utilizaban el tema de las tarjetas como arma arrojadiza contra la DYA. Por fin pudimos presentar toda la documentación exigida y este compás de espera tan largo, si bien no es achacable a la Dirección General de Transportes del Gobierno de Cantabria actual, sí han sido otras administraciones las que han estado frenando este asunto, como la Consejería de Sanidad del anterior Gobierno regional por una parte, y del Ayuntamiento de Castro Urdiales en esta etapa por otra parte, lo que ha repercutido en los vehículos-ambulancia que tienen una vida activa de 8 años, que se han ido, prácticamente, en esta tramitación”.

Recientemente la DYA, reactivó la campaña de captación de socios “de verdad que la acogida ha sido excelente por parte de la ciudadanía castreña. Actualmente hemos llegado a los 3.000 socios aproximadamente, si este número lo vemos, como hacemos nosotros, como que cada socio representa un núcleo familiar, nos iremos a una media de 9.000 personas. Pero sigue siendo una cantidad baja si lo comparamos a la población de derecho y, mucho más baja, si incluimos a los ciudadanos de hecho. Pero así y todo, es una cifra satisfactoria, puesto que de pasar de los 2000 a los 3000 socios, es una partida muy importante”.

Gastos

Satisfechos con el número de socios, viene ahora el capítulo de gastos “que son muchos y cuantiosos los que tenemos, puesto que el mantenimiento del servicio de urgencias durante las 24 horas del día conlleva muchos gastos. Volviendo al hilo de la vida activa de los vehículos, para el próximo año 2006, tenemos que afrontar la sustitución de esos cinco vehículos-ambulancia de los que ahora disponemos, por ello ya estamos pensando cómo adquirir los recursos económicos suficientes para acometer esa renovación y evitar que llegue ese momento en el que nos podamos encontrar sin vehículos suficientes, puesto que todos son utilizados”.

Fuente: eldiarioalerta.com

Satisfacción en la DYA al recibir sus dos primeras tarjetas de transporte