22 de mayo de 2005, 22:44
Afirma que las medidas que se están contemplando para la pesca pueden suponer el cierre de «muchas empresas»
La escasez de pesca, de bocarte fundamentalmente, está siendo un desastre económico para la flota cántabra y ya ha habido diversas reuniones entre políticos y pescadores para tomar medidas al respecto. Sin embargo, las autoridades parecen haberse olvidado de la industria transformadora que vive de la pesca. Al menos así lo denunció ayer la Asociación de Industriales de Conservas, Semiconservas y Salazones de Pescado de Cantabria (Consesa), que advierte que el sector puede verse abocado a una grave crisis empresarial que «no será momentánea, ya que abarcará varios años» y que puede conducir al cierre de industrias.
Según los cálculos de los pescadores, la flota ha perdido casi cinco millones de euros por la falta de bocarte. Ayer, los que levantaron la voz fueron los industriales de la semiconserva y el salazón. Consesa, a través de un comunicado, expresó su «malestar por la falta de información, ya que ha sido ignorada ante un problema que le atañe directamente».
Además, considera que las medidas que se están barajando dañarían seriamente al sector «y se produciría el cierre de muchas empresas que trabajan exclusivamente pesca del Golfo de Vizcaya». También se verían muy afectadas, añade Consesa, las que usan esa pesca en parte.
El comunicado denota constantemente malestar por el olvido de la actividad, y la asociación empresarial recalca que «la masa social que acoge el sector es muy importante en cuanto a número de trabajadores y representa más que la flota de bajura del Cantábrico». Añade que «a nivel económico y de prestigio, el sector representa una parte importantísima de la industria agroalimentaria» de Cantabria.
A su juicio, la prolongación de la situación actual conducirá a una crisis empresarial que se prolongará durante varios años, «con pérdidas económicas cuantiosas y de mercados nacionales e internacionales que pueden ser irreparables».
Durante los últimos días se ha estado discutiendo sobre las indemnizaciones que recibirán los pescadores y Consesa señaló ayer que «los afectados ante la situación que se va a plantear y la crisis en que el sector se verá envuelto tenemos derecho, más que nadie, a unas indemnizaciones que se correspondan con el mal causado».
Asimismo, piden que los organismos responsables tengan en cuenta a los industriales «en cualquier decisión que se tome, tanto en vedas como en paros biológicos, y a los niveles autonómico, nacional y europeo.
Consesa concluye su comunicado afirmando que el sector semiconservero y salazonero « es vital para economía de Cantabria y la desaparición de empresas significaría un caos económico, sobre todo en la parte oriental de Cantabria», donde se ubica la mayor parte de esta industria.
Fuente: Diario Montañes