viernes. 19.04.2024

Los responsables del Grupo de Trabajo de Castro Urdiales, Ignacio Arroyuelos y Fernando Peña, denunciaron ayer el «colapso» existente en las infraestructuras sanitarias castreñas.«Lo único que funciona bien en el actual ambulatorio es el esfuerzo y compromiso que ponen sus profesionales para que todo resulte con un mínimo de eficacia».

El Grupo de Trabajo puso sobre la mesa muchas de las consecuencias de «la desidia de las autoridades regionales con respecto a Castro». Entre ellas, apuntan a la tardanza en la cita previa. «Hasta hace pocos años se atendía el mismo día de la petición. Hoy pueden pasar tres o cuatro días antes de que esto ocurra. Es mejor prever cuando nos vamos a poner enfermos para no colapsar el servicio de urgencias», apuntó con ironía Fernando Peña.

También denuncian que el equipo de radiología del ambulatorio castreño «está obsoleto y es frecuente sufrir una espera de tres o cuatro meses, si hay suerte, para que te hagan una radiografía». Pero no quedó ahí la crítica. El Grupo de Trabajo también denunció la precariedad del servicio de urgencias. «Es necesario un pediatra en este servicio ya que con frecuencia se tardan horas en atender urgencias infantiles porque las salas de espera están colapsadas». En este sentido, denunciaron el caso de un niño que tuvo que esperar más de tres horas para ser atendido por los médicos. De igual forma, denunciaron que la extracción de sangre se realiza en el antiguo local de la biblioteca municipal «que no reúne las condiciones de espacio ni confortabilidad para ello»; la dependencia que los castreños tienen del Hospital de Laredo para consultas con especialistas y operaciones, así como los problemas existentes en la construcción del ambulatorio de Cotolino.

Arroyuelos y Peña responsabilizaron al Gobierno de Cantabria de esta situación. «Ésta es sólo una pequeña muestra del desprecio que suscitamos los castreños a las autoridades regionales. El déficit en infraestructuras y servicios es un atropello a los ciudadanos castreños», aseguraron.

Por ello, desde el Grupo de Trabajo lanzaron una invitación a Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, para que visite Castro Urdiales. «Deseamos que se sumerjan en nuestros problemas cotidianos, en nuestras carencias estructurales y que se ponga a la cola en nuestro ambulatorio», afirmaron. Esta invitación, también fue dirigida a la vicepresidenta regional, Dolores Gorostiaga.

Extraído de: eldiariomontanes.es

«La situación sanitaria de la ciudad está al borde del colapso»