sábado. 20.04.2024

La reciente noticia de que se procederá definitivamente a la rehabilitación del cargadero de Dícido, en la Junta Vecinal de Mioño, dada la suma importancia de la misma, es analizada por su alcalde pedáneo, Víctor Echevarría Sáez, a través de la siguiente entrevista:

PREGUNTA.- ¿Qué refleja la historia de este cargadero de mineral básicamente?

RESPUESTA.- Se trata de una construcción que fue llevada a cabo tras la Guerra Civil; se trata de un vestigio minero industrial importante, hasta el punto que está catalogado como Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento; por lo tanto, desde el punto de vista histórico es un elemento muy importante a conservar y preservar para el presente y con vistas al futuro.

P.- ¿Qué pasos se han dado para conseguir llegar a estos momentos?

R.- Esta Junta Vecinal ha estado peleando constantemente, a través de todos estos últimos años, incluso desde antes de mi llegada a la alcaldía el año 1.999, continuando esta labor inmediatamente de tomar posesión, para conseguir que esta rehabilitación fuera un hecho, como un símbolo de nuestro pueblo. Ni qué decir tiene que, por otra parte, siempre hemos contado con el apoyo del Ayuntamiento de Castro Urdiales, así como del Gobierno Regional últimamente y, también, por supuesto, desde la Delegación del Gobierno en Cantabria han impulsado de una forma definitiva ya, tanto en la pasada Legislatura como en la actual, dicha rehabilitación y que este proyecto pueda ver la luz antes del año 2011. Por ello se tramitó el correspondiente proyecto, que se inició hace ya 10 años, luego hubo que hacer algunas modificaciones del mismo en la pasada Legislatura, hubo que enviarlo a la Demarcación de Costas, hacer el correspondiente informe, en definitiva una tramitación burocrática importante que, insisto, ha llevado muchos años y ahora ha visto la luz con la aprobación definitiva del proyecto por parte de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar, por un importe total de 1.053.000 euros. Una cantidad importante que permitirá, asimismo, la rehabilitación del cargadero y de todas sus instalaciones anejas, así como la rehabilitación de todo el Paseo Marítimo de acceso al mismo y los túneles, etc. También, desde esta Junta Vecinal, hemos estado haciendo un seguimiento constante del expediente. Sin duda, agradecer mucho a la Delegación del Gobierno en Cantabria el impulso y la preocupación por esta obra, velando para que la tramitación burocrática se hiciera de forma urgente, lo que hemos podido apreciar con los últimos pasos dados, por lo que solamente falta el inicio de las obras, ya adjudicadas, que realizará una empresa pública, inicio que se producirá en los próximos meses.

P.- Hubo una época en la que el cargadero estuvo a punto de ser desguazado para destinarlo como chatarra; ¿qué hay de esto?

R.- Así fue. En los años 80, en torno a 1985-1986, incluso antes, la Compañía Minera de Dícido, siguiendo el ejemplo de otras muchas, desmanteló todas las instalaciones que tenía en el Cordón Minero, todo aquello que se podía aprovechar para su posterior venta; entonces estuvo a punto de ser destruido; pero se salvó in extremis al comprarlo, por un precio casi simbólico, la empresa derivados del Flúor quien, a su vez, se lo vendió al Ayuntamiento de Castro por una peseta de las de entonces. Posteriormente se pudo comprobar el valor histórico e industrial de esta joya, por lo que se comenzaron a dar los pasos anteriormente comentados.

Otras actuaciones en la zona del cargadero

P.- Además de la rehabilitación del propio Cargadero, ¿qué es lo que se tiene previsto hacer en su entorno?

R.- Se conseguirá que el Paseo Marítimo actual, que fue rehabilitado hace años por el Ministerio de Medio Ambiente a través de la Demarcación de Costas, se vea continuado hasta el mismo cargadero, lo que permitirá crear una ruta costera importante que desembocará en los túneles que se encuentran en la base del propio cargadero, además las escaleras que se encuentran en esa misma zona serán recuperadas para poder acceder a la parte suprior, es decir, a las campas de Cotolino, con lo que se podrá conectar la zona de Dícido con la de Cotolino a través de un paseo costero de gran atractivo.

Extraído de: elalerta.com

«La rehabilitación del cargadero es un símbolo del pueblo de Mioño»