Abel Macías Morant MÁXIMO GOLEADOR DEL CASTRO DE FÚTBOL SALA - ¿Cuándo te iniciaste en el fútbol sala?
- Tenía dieciséis años. Empecé desde pequeñito jugando al fútbol
sala y la verdad es que nunca jugué al fútbol de campo. Con dieciséis
años lo practiqué en juveniles y la verdad es que siempre me pareció
más bonito el fútbol sala que el fútbol de once jugadores.
- ¿Qué demarcación ocupas en la cancha?
- Ala pívot.
- ¿Qué logros deportivos has conseguido en estos más de diez años que llevas compitiendo?
- Ascendí a la División de honor con el equipo Benicarló, y jugué
durante una temporada en la máxima división del fútbol sala español.
- ¿Usted cree que se puede vivir del fútbol sala tal y como hacen otros jugadores de otras especialidades deportivas?
- Bueno, sí. Hay jugadores que viven de ello, sobre todo algunos
que juegan en la División de honor que compiten en equipos como
Interviú, El Pozo y algunos equipos más.
- ¿Qué es lo más positivo que te ha pasado en el fútbol sala?
- Haber recalado aquí, haber conocido Castro Urdiales y, sin duda,
haber conocido a la novia, que es de aquí. Y los amigos que he hecho
aquí.
- Claro que, también habrá habido penas, ¿no?
- Por ahora nada, ninguna. Creo que hasta el momento no he tenido nada negativo practicando este deporte.
- Desde su experimentada posición ¿Cómo ves el fútbol sala en Cantabria?
- Bueno, hay varios jugadores de categoría, que tienen un alto
nivel, sobre todo en nuestro club, que está realizando ahora un gran
trabajo con los niños. Sin duda, algo muy positivo de cara al futuro
para ellos, claro, y para el equipo castreño.
- En esta temporada el equipo no está dando las alegrías a las que tenía acostumbrada a su afición.
- Creo que no nos merecemos figurar en la posición en la que
estamos situados ahora. Pienso que el equipo, al final, estará donde se
merece y conseguiremos salvar los play off de descenso.
- La afición de Castro Urdiales, el ambiente del pabellón Peru
Zaballa es, o ha sido hasta ahora, uno de los más temidos de la liga
por la presión a que somete al equipo rival.
- La afición castreña está en su línea de siempre, de apoyo
constante al equipo. Aunque ya no se llena el pabellón como antes de
aficionados, la gente que acude anima mucho y apoya al equipo hasta el
final.
- ¿Te has planteado cómo va a ser tu vida cuando dejes el fútbol sala?.
- No. Ni me lo imagino. Como
mucho, vendré a ver los partidos, pero no me he planteado ser entrenador ni nada relacionado con el fútbol sala.
- Has conseguido ser el máximo goleador del Castro en sus veinte
años de historia, has disputado play off de ascenso y jugado en
división de honor. ¿Qué queda por conseguir en el fútbol sala?
- Sin duda, y por encima de todo, logar el ascenso con el Castro a División de honor.
Extraído de: eldiariomontanes.es