La Policía local de Castro está a punto de estrenar su nueva comisaría. A falta sólo de la puesta a punto de la centralita de llamadas, los agentes abandonarán en los próximos días la antigua sede de la calle Arturo Dúo para instalarse en unas dependencias de 320 metros cuadrados que tienen capacidad para albergar a 80 efectivos, el doble de los que componen actualmente la platilla. De esta forma, contarán con espacio suficiente para un eventual aumento de policías, una vieja aspiración de los responsables municipales.
Las nuevas instalaciones, próximas al polideportivo Pachi Torre -en el número 1 de la calle Leonardo Rucabado- cuentan con una sala de atestados, otra de espera y una tercera con cristales tintados para las ruedas de reconocimiento. También dispone de una oficina de atención al ciudadano y otra para el sargento jefe, amplios vestuarios masculinos y femeninos, una cocina y dos almacenes. Además, hay una gran habitación multiusos que, en principio, está ideada para albergar los cursos de formación para los agentes.
Sala de control
Otra de las estancias se acondicionará como sala de control dotada de monitores. Hasta ella llegarán las imágenes recogidas por las cámaras que se instalarán en varias zonas del municipio, a fin de vigilar los accesos a los colegios y el tráfico en algunos cruces. A diferencia de las actuales, estas dependencias no tienen gimnasio.
El Ayuntamiento de Castro ha invertido más de 600.000 euros en el proyecto. Los agentes abandonarán su actual centro de operaciones antes de que finalice el mes.
Extraído de: elcorreodigital.com
