El presidente de la Cofradía de Pescadores de Castro Urdiales, Pablo Villasante Zaballa, ha señalado que «por fin, después de habernos quejado con insistencia y seriamente durante los últimos días, se han recobrado las obras de instalación de los dos carros varaderos en la rampa de San Guillén, porque creemos que después de nueve meses deberían estar terminadas a pesar de las condiciones climatológicas adversas que hemos padecido. Por lo que esperamos que en los próximos días esté todo terminado y podamos utilizar ambos carros para no tener que llevar nuestros barcos a otros puertos para poder realizar los trabajos de limpieza de los mismos.
De todas formas el pasado lunes 23 de febrero recibimos un escrito del encargado de Puertos, en el que nos comunicaba que, a partir de dicha fecha, podíamos utilizare el carro pequeño, con capacidad para 200 toneladas y embarcaciones que no superen los 15 metros de eslora, pero solamente durante las pleamares, ahora ya han sido colocados los 10 metros de raíles que faltaban, se está procediendo a echar el hormigón de la base y entonces se podrá utilizar el carro en cualquier estado en que se encuentren las mareas. En cuanto al carro grande, capaz para 400 toneladas, tanto el carro como la obra de fábrica están terminados, solamente está a falta de terminar los brazos hidráulicos».
Pesimismo ante la campaña del verdel que acaba de comenzar
En cuanto a la situación de la campaña del verdel iniciada a primeros del mes de febrero, el patrón mayor de Castro Urdiales, Pablo Villasante, no se encuentra nada optimista debido a que «para nuestra Cofradía no está suponiendo nada positivo, pues las embarcaciones de este cabildo no vienen a vender aquí porque los caladeros se encuentran mucho más cerca de otros puertos del noroeste y, además, los precios son mejores que en nuestro puerto».
Extraído de: elalerta.com
