jueves. 18.04.2024

La abuela de Castro Urdiales, Juanita Cobo, cuenta actualmente con 101 años de edad y cumplirá los 102 el próximo mes de marzo de 2008, A esta edad resulta increíble el estado psíquico que conserva, con una memoria de privilegio y unas facultades envidiables, siempre dispuesta a dar un repaso pormenorizado de su dilatada historia que es, al mismo tiempo, la de más de un siglo de la historia de Castro que la vio nacer aquel ancestral año 1906. Juanita, siempre dispuesta al diálogo, es una persona muy entrañable.

Le cuesta mucho despedirse de sus visitas, quisiera que estuvieran con ella permanentemente, cuando se le pregunta cómo transcurría su vida en sus primeros años de adolescente, recuerda que “yo era amiga de Asun, la hija de Fausta que tenía una tienda en la calle La Mar y salíamos de paseo todos los días recorriendo los aledaños de la playa de Brazomar, Muelle Don Luis etc.”.

A la hora de divertirse “lo pasábamos muy bien, éramos muy felices, nos conocíamos todos y nos llevábamos muy bien, había mucha condescendencia entre todos. Recuerdo que en el Paseo de La Barrera, asistíamos a los bailes que tocaba la Banda Municipal de Música, había dos paseos distintos que siempre los respetábamos, cada cual paseaba por el que le correspondía y nunca había líos en este sentido, el más cercano al casco urbano era para las personas menos pudientes económicamente y el que estaba más cerca de la N-634, hoy calle La Ronda, paseaban las personas más pudientes.

También había dos zonas de baile en La Barrera, una en la parte superior del kiosco para los menos pudientes y otra en la parte inferior para los más pudientes. Al final de los bailes, la Banda Municipal tocaba la Jota del Regateo entonces siempre me venía a buscar Asun Anglada, mi amiga de siempre, para bailarla en pareja, los hacíamos muy bien, sobre todo yo tenía mucha fama de hacerlo muy bien”. Refiriéndose a la situación social en aquellos años, dice que “no eran tiempos tan difíciles, éramos muy felices, Castro era estupendo y lo pasábamos muy bien, sin olvidar cuando íbamos a las romerías, sobre todo a las de san Pelayo y San Pedro en la campa de Brazomar; al final veníamos cantando, enlazados todos por los brazos, hasta el Paseo de La Barrera, al son que tocaba la Banda Municipal. Recuerdo, sobre todas, la canción a la Canilla famosa trainera de Castro que en aquellos años era la mejor”.

Cuando se le pregunta por el horario de entrada en casa, no lo piensa ni un solo segundo, espontáneamente dice que “yo tenía una madre a la que adoraba, a mi padre también le quería mucho, confiaba mucho en mí y nunca le di motivos para que perdiera esa confianza, por ello no importaba a la hora que llegara y nunca hizo falta que me reprendiera”. Al solicitarle un consejo para la juventud actual, dice que “estudien mucho; estudiando siempre tendrán más oportunidades, además, de una juventud culta se pueden esperar cosas buenas; que se sacrifiquen ahora un poco, mañana se alegrarán de haberlo hecho”.

Extraído de: elalerta.com

Juanita, a punto de cumplir los 102 años