jueves. 28.03.2024

Contemplar la tradicional estampa de muchos vecinos de Castro Urdiales

alimentando a diario a palomas, gaviotas, gatos y otros animales

abandonados en la calle en espacios públicos de la ciudad, podría pasar

a la historia. Al menos eso es lo que pretende el alcalde castreño,

Fernando Muguruza, con la publicación de un bando en el que se recuerda

que la ordenanza municipal de limpieza viaria contempla hasta

sanciones. El incumplimiento de esta normativa llevará consigo la

aplicación de una multa que oscila entre los 30 y 60 euros cuando se

cometa la primera infracción. A los reincidentes, se les incrementará

la cuantía aunque todavía no se ha fijado la misma.
A pesar de las advertencias del regidor municipal, lo cierto es que

algunos vecinos parecen haber hecho caso omiso a esta normativa. Nina

Pérez, responsable de la Consultoría Medioambiental de Educación

Integral 'Etritón', ha recordado al respecto la importancia del

cumplimiento de la normativa.

«Los vecinos tienen que tener

un poco de conciencia y si los hay que quieren mucho a los animales que

quieran también a los vecinos porque en el fondo les están creando un

problema. «La ordenanza prohíbe terminantemente dar de comer a animales

callejeros dentro del término municipal», apuntó.

Por su parte,

Javier López, delegado de la Sociedad Española de Ornitología (SEO) en

Castro Urdiales, hizo referencia al problema sanitario que puede

originar alimentar a este tipo de animales en los espacios públicos.

Con respecto a las aves, se trata de un problema sanitario porque en

torno a estas concentraciones se pueden transmitir enfermedades.

Además, como tampoco hay un control, no es apropiado alimentarlas

echando comida en jardines o calles. También se puede convertir en un

problema de limpieza pública.

Medidas

Además del bando

del alcalde regionalista, el Ayuntamiento, a través de la Concejalía de

Sanidad y AsuntosSociales, recuerda la necesidad de obedecer la

petición del regidor. Pero no sólo desde este departamento se solicita

a los vecinos que se respete la ordenanza. También desde la Policía

Local se pide su cumplimiento. Por el momento no ha habido

ninguna sanción porque el objetivo inicialmente no es multar, «sino

concienciar a la población de las consecuencias negativas desde el

punto de vista higiénico-sanitario que tiene el hecho de

alimentar a estos animales en las vías públicas», señaló en

declaraciones a este periódico el jefe de la Policía Local, Domingo

García.

Los gatos, otro problema a evitar

La técnico de la Concejalía de Sanidad y Asuntos Sociales de Castro

Urdiales, Iciar Muruaga, explicó ayer, miércoles, que el Consistorio

municipal pretende evitar que la población felina crezca

exageradamente.

Para mantener el equilibrio entre humanos y

gatos, el Ayuntamiento controlará sus camadas de gatos. Además, se

recogerá a los animales de la zona por donde vagabundean. La intención

es esterilizarlos y devolverlos a su punto de origen.

La

Concejalía creará varios puntos de alimentación en la localidad donde

se les dará de comer exclusivamente una dieta de pienso y agua. Una

iniciativa que está en fase de trámite. Muruaga recordó a los

vecinos que «los desperdicios no son comida para gatos, sino basura y

que una ordenanza en vigor, sanciona esta actuación antihigiénica». Los

puntos limpios sustituirán de esta manera a las 'barriadas' de cartones

y cajas que, a día de hoy, dan cobijo a los felinos en varios puntos

del municipio.

Extraído de: eldiariomontanes.es

Guerra contra la plaga animal