El sistema de conducción de agua en Castro Urdiales sufrió ayer una avería que duró unas tres horas y media. Entre las nueve de la mañana y las 12,30 los vecinos de Las Cadenas y el barrio de Cotolino, unos 20.000 habitantes aproximadamente, sufrieron el imprevisto corte producido por una grieta en la canalización de agua que fue detectada por los servicios técnicos de la empresa Aguas del Norte (ANSA).
Enrique Albisu, encargado de ANSA, desveló que una soldadura de la antigua tubería que distribuye el agua a Cotolino fue la causante del problema. Para proceder a la reparación se vieron obligados a levantar un parque infantil situado en la calle Leonardo Rucabado, lo que dificultó las tareas, que se alargaron unas tres horas y media. Cerca de la una de la tarde, los vecinos recuperaron el suministro. Los técnicos afirmaron que el tiempo y la presión habían deteriorado el conducto.
La falta de servicio provocó molestias a miles de ciudadanos incluidos hoteles. Albisu aseguró que la reparación se realizó de forma urgente y reconoció que los vecinos habían efectuado numerosas llamadas a la empresa de suministro. «Ha habido gente tolerante y gente que no. Hemos hecho los arreglos lo más rápido posible», concluyó.
Los bomberos, sin agua.
En el polígono de La Tejera, los bomberos municipales se dieron cuenta de que en su sede faltaba agua, como cualquier vecino, al abrir el grifo. Afortunadamente, durante la mañana de ayer no hubo que llevar a cabo ninguna salida urgente para extinción de incendios, aunque, según afirmó el jefe de bomberos de la localidad, Manuel Santa María «el suministro propio trae agua, pero con menos presión».
Fuente: eldiariomontanes.es
