Sin embargo, aunque las aspiraciones de una relación no han cambiado el mundo si lo ha hecho. Cada vez son más los solteros a los que, debido la ajetreada dinámica actual, les es difícil tener tiempo para ligar y las personas ya no están tan abiertas a los familiares y amigos como casamenteros. Por ello, la dinámica de las citas también ha cambiado. Utilizar aplicaciones para ligar se ha convertido en la tendencia y las interacciones virtuales son la norma ¿por qué? Resultan mucho más cómodas y prácticas que la dinámica ensayo-error que se aplicaba anteriormente para conseguir pareja. Las personas se encuentran cada vez más apegadas a las tendencias tecnológicas y la han convertido en su principal medio de contacto con el mundo exterior. Además de esto, les es más fácil emplear esta opción la cual permite ponerse en contacto a través de chats desde cualquier lugar, dispositivo y en cualquier momento libre. Por otro lado, resultan más económicas que ir de bar en bar o de un restaurante a otro mientras se consigue a la persona indicada, lo que es muy útil ante la crisis económica que viven especialmente los adultos jóvenes. Aunado a ello, estas webs ofrecen algoritmos de emparejamiento inteligentes que estudian la compatibilidad entre las personas y cruzan solo a aquellas con buenas posibilidades de éxito, lo cual, resulta muy atractivo para el pragmatismo de la sociedad actual.
Por otro lado, las tendencias de la tecnología no son solo para conseguir relaciones, estas se ha hecho fundamentales en todo, incluso en aquellas parejas ya establecidas, afirmando muchas de ellas que juegan un rol importante en su dinámica y comunicación. La tecnología ha estrechado lazos y cerrado brechas y no se puede hablar de relaciones sin hablar de la misma. Las interacciones son necesarias y las hay de todo tipo, aquellas con miras de algo que sea casual y otras que buscan la formalidad y el “felices para siempre”, además de las laborales y de amistad. Sea cual sea, los tabúes respecto a las mismas ahora son menores y la gente se siente mucho más libre al decidir. La pandemia del COVID, que aún sigue sumando casos, al aumentar la depresión debido al aislamiento hizo evidente la necesidad que tienen los seres humanos de las relaciones e incluso los más escépticos del amor valorarán mucho a las mismas.