El primero se produjo en la playa de Dícido, sobre el 10 de enero, un mes más tarde, ayer, se pudo ver otro ejemplar cerca del muelle norte de la dársena castreña, hoy, 10 de febrero, he podido ver un ejemplar alimentándose en aguas abiertas del Rebanal, entre olas de cinco metros. La observación ha sido corta y con la llegada de un chubasco y por lo alejada que estaba, no la he vuelto a localizar.
La foca devoraba un pescado con su típica postura vertical, sosteniendo el pez con las manos y mordiendo en su zona ventral, justo donde los pescados acumulan la grasa, tal como se ve en las fotos tomadas en Santoña del ejemplar que se allí encuentra desde finales de diciembre.