El consejero de Presidencia y Justicia, Vicente Mediavilla, ha afirmado
que lo ocurrido hoy en Castro Urdiales, donde se ha confirmado una
explosión en el Alto de la Granja y otra está pendiente de confirmar,
es una "especie de pataleta" y de "no querer asumir las reglas normales
de juego" por parte de los "violentos de siempre" ante la designación
de Patxi López como 'lehendakari'.
El consejero, que se trasladó a Castro Urdiales para comprobar el
alcance de lo sucedido, señaló en declaraciones a los medios de
comunicación que este hecho es una forma de "hacerse notar" por parte
de "aquellos pocos" ante el "normal funcionamiento" de las
instituciones democráticas, que es "lo que quiere y desea" el pueblo
español y el vasco.
En este sentido, destacó que los ocurrido es "la reacción de los
violentos" ante lo que es "un día feliz" para los demócratas, por la
designación del nuevo 'lehendakari', Patxi López, que constituye una
"situación normal de higiene democrática".
Mediavilla subrayó que frente a ello hay que "seguir confiando"
en las instituciones democráticas y en el "buen trabajo" de las Fuerzas
y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la Administración de Justicia
para que los autores de estos hechos "terminen entre rejas".
DAÑOS DE "ESCASA ENTIDAD"
Por otro lado, el consejero se felicitó porque no se hayan
producido daños personales, sino sólo materiales y de "escasa entidad",
por lo que reiteró que los que sus autores han pretendido es alterar el
"normal funcionamiento" de las instituciones ante la toma de posesión
del nuevo 'lehendakari', pero que "no se va a empeñar para nada",
recalcó.
En el caso de explosión todavía sin confirmar, explicó que en un
primer momento no se quiso llegar hasta el repetidor del Monte Cueto
donde supuestamente se habría producido porque el acceso es muy
estrecho, de menos de un metro, con una curva a la derecha, y podría
existir una posible trampa, por lo que se ha esperado a la llegada de
los artificieros para descartar este extremo y hacer la correspondiente
valoración.
Señaló que también en este caso, como en el primero, la supuesta
explosión se ha conocido por el aviso de un ciudadano que dijo haberla
escuchado, extremo éste que se está intentando confirmar.
Recordó que se ha procedido al desalojo del colegio MenéndezPelayo de Castro Urdiales y se ha trasladado a los niños a un "lugar
seguro", en concreto a una cercana residencia geriátrica, sobre todo
para evitar cualquier posible daño y por seguridad preventiva.
Extraído de: europapress.es