Un vecino de Bilbao de 32 años ha sido condenado a cuatro años de
prisión y multa de 40.000 euros como autor de un delito de tráfico de
estupefacientes. La sentencia, dictada de conformidad por la sección
primera de la Audiencia de Cantabria, es firme ya que el propio
imputado aceptó los cargos y se declaró autor.
Los hechos ocurrieron el día 21 de abril de 2006, sobre las siete y
cuarto de la tarde, cuando el acusado fue sorprendido por una patrulla
de la Guardia Civil de Castro Urdiales en un control rutinario con 990
gramos de anfetamina. La droga era de una riqueza media del 4 por
ciento.
Los agentes dieron el alto al acusado cuando se
trasladaba en el vehículo que conducía, un Opel Corsa, matrícula
BI-7182-AZ, de su propiedad por la rotonda de la salida norte de la
villa castreña.
Según recoge la sentencia, el acusado escondía
la droga, que pretendía destinar a la venta a otras personas, junto a
la batería del coche.
La sustancia incautada tendría en el
momento de los hechos un precio de 16.859 euros. El detenido permaneció
en prisión provisional por estos hechos desde el día 22 de abril de
2006 hasta el 8 de agosto del mismo año. La aceptación de los cargos
que le imputaba el Ministerio Fiscal hizo que la sentencia fuera
dictada de conformidad.
Extraído de: eldiariomontanes.es