Con motivo de la conmemoración del 11 de Mayo de 1813 la Concejalía de Educación y Cultura del Ayuntamiento de Castro Urdiales con la colaboración de la Asociación Cultural 11 de Mayo ha organizado una serie de actos que tendrán lugar a lo largo de la jornada de hoy. La programación comenzará con un acto institucional que tendrá lugar a las doce y media en el salón de plenos del Ayuntamiento para, seguidamente, realizar una ofrenda floral en la Cruz del 11 de Mayo.
A estos actos hay que sumar la elaboración de unos programas que se repartirán al público asistente y en los que se ha intentado resumir todo lo que acontecido en aquella fecha.
«Es terrible que hubiera tantos muertos en Castro»
A sus 53 años de edad, Fernando Terradillos, presidente de la Asociación Cultural 11 de Mayo, recuerda con nostalgia lo hechos acaecidos tal día como hoy, un 11 de Mayo de 1813. En la memoria, los cientos de castreños que perecieron a manos de los franceses.
-¿Cómo surge la asociación 11 de Mayo?
-Surgió hace seis o siete años cuando un grupo de amigos decidimos crear este colectivo y poner el nombre del 11 de mayo, ya que se había olvidado mucho la efeméride en el municipio. La gente a penas se acordaba de lo sucedido en esa época y, además, se escuchaban versiones muy dispares. Entonces lo que hicimos fue buscar esos restos que habían dejado los franceses en Castro, como es el caso de la cruz de la calle San Juan.
-¿Qué me puede decir de la celebración en sí?
-Esta fiesta se celebró durante años en Castro con 'gran pompa', incluso llegó a venir la reina Isabel II a participar en los actos. Se celebraba por todo lo alto. Incluso hay gente mayor que recuerda que durante ese día, en las escuelas de su época, los maestros llevaban a los alumnos al Ayuntamiento para explicarles el significado de esos cuadros de Quintana que plasman la realidad de la época.
-¿Por qué cree que se ha perdido la tradición de celebrar esa efeméride por todo lo alto?
-Pues no lo se. Porque se había perdido por completo. Hay que recordar que lo de colocar un ramo de flores en la cruz de la calle San Juan fue una propuesta mía.
-¿Tenéis pensado ampliar esta celebración en años sucesivos?
-La verdad es que somos poca gente y no somos profesionales de la historia. Entonces lo que pretendemos es lo que se ha conseguido, que el Ayuntamiento haya tomado esta celebración como algo suyo y por lo menos, todos los años se haga algo. De esa forma se puede ampliar la fiesta, porque creo que hay otros proyectos por ahí.
-¿Qué otras huellas quedaron del paso de los franceses por Castro?
-En la zona del puerto se puede observar algún que otro cañón, que se utilizan en la actualidad para atar los barcos. Aunque hay alguno que está dado la vuelta y disimula más, hay uno junto a la Cruz Roja que se distingue bien. Además, allí era dónde la cofradía ponía la bandera.
-¿Qué supone para usted ese día?
-Es una parte más del desastre que ocurrió en aquellos años en España. De todas formas, Castro Urdiales fue duramente castigado, dada la población que tenía en aquel momento. Es terrible que hubiera ese número de muertos y los destrozos que ocasionaron en las casas del pueblo. No hubo familia en Castro que no tuviera algún muerto en aquel fatídico evento del siglo XIX.
Extraído de: eldiariomontanes.es