viernes. 26.04.2024

El proceso de soldadura MIG es uno de los más usados en diferentes sectores de la industria, debido a que ha representado un aumento significativo en la productividad, además de dar la posibilidad de automatizarlo, para lograr mejores resultados.

Es cierto que existen muchos tipos de modalidades de soldaduras y cada una tiene una aplicación única según sus características; no obstante, existe un motivo por el cual el TIG y MIG son los más usados, sobre todo este último.

Para poder determinar si es el mejor para usar, vamos a hablar sobre sus beneficios y características, de modo que conozcamos a detalle el MIG.

¿Qué es el MIG?

Antes que nada, es importante que sepamos qué es. Esta soldadura, también conocida como MAG o GMAW, es la unión por arco automático o semiautomático de dos materiales, ya sean metálicos o termoplásticos.

El arco se produce a través de un electrodo formado por un hilo continúo junto a las piezas a soldar, lo que permite que quede protegido de agentes atmosféricos gracias a un gas inerte, en este caso la MIG o, un gas activo, la MAG. 

Su procedimiento se caracteriza por ofrecer varias posibilidades según el material usado, la posición de soldadura y el grado de mecanización.

¿Cuáles son las ventajas del MIG ante otras soldaduras?

Visto desde diversos puntos, podemos identificar rápidamente la causa de su fama, pues, primeramente, ofrece alta productividad, ya que durante el proceso se suministra un alambre constante. Además, en comparación al TIG o SMAW, esta soldadura permite conseguir alta calidad en menor tiempo.

Por otro lado, es un proceso versátil, así que puede ser usado para unir metales y aleaciones como el hierro, níquel, cobre y aluminio, sean iguales o diferentes y en diferentes posiciones.

También tiene a favor que produce pequeñas salpicaduras, las cuales pueden eliminarse sin problemas, lo que aporta buen acabado y su gas de protección contribuye en la poca pérdida de elementos de aleación.

Por último, no crea muchos gases tóxicos y contaminantes, lo que nos ayuda en la salud y, si somos principiantes o expertos, podemos variar entre sus procesos.

¿Tiene desventajas la MIG?

Ahora bien, ante lo bueno, debemos tener presente que el equipo de soldadura es complejo a diferencia de otros y, por causa de la alta entrada de calor que tiene junto a la fluidez del baño de fusión, se complica el proceso en posición vertical y sobre la cabeza.

¿Cuántos procesos de soldadura tiene la MIG?

Hasta el momento se practican tres procesos de soldadura MIG. El primero es el semiautomático, el cual es el más común y regula parámetros de forma automática por el equipo, como la tensión y corriente, pero es el operador el encargado de manejar la pistola manualmente.

El otro es el automático, que es un proceso que sólo puede realizarse con hilo. En este caso, la tensión e intensidad deben ser regulados con anticipo por el equipo según lo requiera cada trabajo y es una boquilla la que aplica la soldadura.

Por último, está el robotizado. Este se usa a escala industrial y se programan los valores mediante una unidad de Control Numérico Computarizado mientras un brazo mecánico transporta, une y realiza los acabados automáticamente.

¿En qué se puede aplicar la soldadura MIG?

Al ser una técnica versátil, se puede aplicar en diversos sectores de materiales, piezas y estructuras, como la soldadura en chapa fina, en reparación de automóviles, tuberías, construcciones pesadas (como puentes), reformas automotrices y del hogar y en estructuras de acero o recipientes de presión.

¿Por qué la soldadura MIG es la mejor?